HASTA EL LUNES DE LA PRÓXIMA SEMANA REABRIRÁ CENTRO REGIONAL DE VÍCTIMAS


Manual para soporta el sufrimiento
Por. Víctor Garavito

A las cuatro de la mañana se encontraban cientos de desplazados desconcertados en las puertas del Centro Regional de Atención de Víctimas -CRAV- al conocer la noticia que desde este miércoles 1 al próximo 3 de agosto no habrá atención para sus usuarios.

El irregular y singular hecho, era anunciado con un escueto cartel que poco o nada informaba, mientras crecía el descontento debido a la desinformación, un pastor invitaba a orar a las cinco de la mañana con micrófono en mano y en medio de canciones cristianas que sonaban a todo volumen para no dejar escuchar el creciente descontento popular.

De la misma forma, una fervorosa religiosa que salía del interior de las instalaciones del CRAV creía tener la respuesta y la terapia adecuada para contener la progresiva rabia entre quienes debieron ser los primeros en ser informados primero por la Dirección Territorial del Magdalena de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas; ella también invitaba a la gente a rezar, no se sabe si con la intención de bajarle los caldeados ánimos a quienes llagaban de diferentes partes del departamento o de la ciudad en busca de atención o quizás la religiosa solo busca incorporar almas descarriadas a su feligresía, con la que se aumenta el diezmo para dios.

De ahí que, entre los gritos de quienes reclamaban la atención y del altisonante llamado a la oración de los cristianos, que intentaban ahogar las protestas de la gente, se asomó el celador para indicar que los funcionarios no atendían porque no se les había hecho aún el contrato por parte de la Unidad de Víctimas, cierto o no fue la única respuesta a las preguntas que ansiosamente esperaban los usuarios del CRAV.

Al mismo tiempo, se conocía que en los periódicos regionales se confirmaba la noticia: “durante los días 1, 2 y 3 de Agosto de 2018” no hay atención y la justificación es tan extraña como sorprendente, porque su argumento es el: “efectuar ajustes administrativos y mejorar la atención”, es decir, al parecer el celador tenía razón “no atienden porque no hay contratos”.

Sin embargo, en el día de ayer, martes 31 de julio, sobre las 11:30 de la mañana dejaron de atender, porque como lo confirmó directamente un funcionario del CRAV, se encontraban dañadas las impresoras, aunque este miércoles su Director Carlos Ortíz Ruíz, intenta desvirtuar ante la prensa local esta realidad presentando como un gran avance “los $123 mil millones entre ayudas humanitarias, sumado al pago de indemnizaciones en beneficio de las víctimas que suma un poco más de 278 mil millones de pesos”, según dijo el alto funcionario.

Frente a estas palabras las víctimas del Magdalena se preguntan donde estarán esos recursos si en su gran mayoría sobrevive por debajo de la línea de pobreza sin alternativas que garanticen ni el reestablecimiento ni la reparación integral a sus familias y bajo la segregación institucional con que esa entidad trata revictimiza a quienes se supone son el eje de su objeto misional y para completar el panorama son ciudadanos que cargan con todo tipo de estigmatizaciones por parte de los funcionarios púbicos, que los ven como enfermos mentales al considerarlos que están inmersos en el «trauma o síndrome del desplazado».



Manual para soporta el sufrimiento

Primero

Si quiere ser atendido debe madrugar. “Entre más temprano mejor”, dicen los funcionarios del CRAV. Cuando llegue, pregunte por el señor de los tintos encargado de organiza la lista para la entrega de los fichos; pero no se olvide de comprarle el cafecito sino es muy probable que su nombre no sea anotado en la lista y pierda la trasnochada.

Segundo

Los cristianos siempre apelan a la libertad de cultos, consagrada en la Constitución, pero los que no son de ninguna de estas confesiones religiosas, iglesias o sectas si tenemos que soportar el marketing religioso al que apelan para hacer crecer su feligresía. ¿Y quién protege la libertad de los que no profesan una creencia espiritual diferente a la de los cristianos? ¿Acaso el Estado no es laico?

De tal manera, que si ud. no es cristiano mejor sea discreto y dispóngase a obedecer al pastor y la misionera que captan almas durante las madrugadas en la puerta del CRAV, que más bien parecen ser parte de un dispositivo terapéutico de la Unidad de Víctimas que les sirve de válvula reguladora para acallar y neutralizar en nombre de dios cualquier expresión de descontento, porque como decían a la entrada del Centro Regional: “así son los designios del señor”. Aunque dice la canción de Alí Primera, “No basta con rezar... Hacen falta muchas cosas para conseguir la paz”.

De todas manera, tenga presente que hasta los cristianos pueden hacerle desagradable su espera y hasta pueden intervenir para hacerle muy molesto su paso por el CRAV, si ellos se dan cuenta que ud. no comparte su fe ni creencias no discuta con ellos ,el autodenominado ejército de dios con los que no se puede razonar. Así que tenga paciencia y si es musulmán, hindú, taoista, pertenece a la orden Rosacruz, práctica el Zen, es agnóstico o si ha caído en el más terrible de los delitos, ser ateo.

Tercero

Si conoce a algún miembro de la Mesa de Participación de Víctimas, mejor no le pida ayuda. Vaya ud. solo por sus propios medios, porque ellos sirven para tres cosas: 1) Viaticar a sus reuniones en Bogotá o cualquier lugar del país; 2) Estar detrás de la información de los proyectos o ayudas internacionales solo para beneficiar a su organizaciones, que dicho sea de paso a la gran mayoría de víctimas no representan, y 3) para lanzarse a los cargos de elección popular, porque se ha vuelto atractivo para ellos utilizar estos cargos para realizar proselitismo, al que tienen derecho claro esta, pero no en nombre el supuesto altruismo de servicio a la comunidad. Así que no cometa el mismo error que yo cometí, porque esta expuesto a que le hagan perder su tiempo.

Cuarto

En Colombia nunca triunfó la teoría marxista que proponía la dictadura del proletariado; sin embargo, hoy vivimos bajo la dictadura del “celaduriado”. Por lo tanto, no se le ocurra discutir ni intercambiar pareceres con los celadores del CRAV, inmediatamente queda ud. señalado y le sería infranqueable el paso de su entrada principal.

Así están las cosa y la tendencia es ha empeorar, porque si con Santos, el presidente de la paz y ganador del Nobel son así imaginasen,  con Uribe, perdón con Iván Duque, que son los del partido del Centro Democrático, de Álvaro Uribe Vélez, el mismo de los más de 3.000 casos de ejecuciones extrajudiciales o falsos positivos, de la persecución a periodistas, las chuzadas del DAS, los desaparecidos, de los vínculos con los narcoparamilitares, etc... Nada halagüeño pinta ni este hoy ni la incertidumbre de mañana, que cada vez se torna más sobria para la víctimas del país.



Fotografía y Vídeo: [ar] actualidad regional, agosto de 2018.

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