EL OTRO AMOR, VISTO DESDE JULIO CORTÁZAR

Por. Víctor Garavito

Una de las obra más importantes del llamado Boom de la la literatura Latinoamérica, es sin lugar a dudas la extraordinaria novela “Rayuela”, del escritor argentino Julio Cortázar.

Este narrador porteño, es considerado es uno de los escritores más prolíficos de la letras de nuestro continente, aunque nació en Bruselas, 1914, es una de la grandes figuras de la literatura hispanoamericana del siglo XX, que comparte con Borges, su pasión por el cuento fantástico; además, de su exploración de lo metafísico y el abordaje de la enigmática condición humana en todos sus personajes, así como el empleo de la música como personaje esencial en sus narraciones.

El pasado 12 de febrero se cumplieron 30 años de su temprana muerte, que sucedió en París, durante el invierno de 1984, pero nos dejó un importante legado literario en el que se encuentran entre sus obras más significativas la novelas como Los premios (1960); Rayuela (1963) y 62 Modelo para armar (1968). Así mismo, sus libro de cuentos en los que encontramos a Bestiario (1951); Final del juego (1956); Todos los fuegos el fuego (1966) y Queremos tanto a Glenda (1980).

Por eso, en el Día de San Valentín le dejamos esta lapidaria frase de Julio Cortázar al rededor del amor, que nos acerca como nos problematiza lo más profundo de la condición humana y no el superfluo amor del consumo que nos venden hoy, entre las rosas, chocolates y frasecitas melosas que nos mienten sobre la realidad de quienes realmente somos y como expresamos nuestros sentimientos, en medio de una sociedad acostumbrada a simular.