¿SÍ SE DESPLOMÓ EL PUENTE CAERÁ VARGAS LLERAS?

Por. Víctor Garavito

Un saldo de 10 muertos y por lo menos 8 heridos de gravedad, según arrojan las cifras oficiales, dejó el desplome del Puente Chirajara, en la vía que de Bogotá conduce a Villavicencio; autopista que ya había sido inaugurado el exvicepresidente, fundador del partido Cambio Radical y hoy candidato a la presidencia Germán Vagas Lleras.

Sin embargo, un 19 de noviembre del 2017, la noticia nacional destacada por los medios privados de información de la capital del país, nos presentaba al sonriente presidente Juan Manuel Santos, cuando inauguraba los 15 túneles de esta vía, en una flamante camioneta Toyota, al lado del banquero Luis Carlos Sarmiento Angulo. En esos momentos el país también sonreía pletórico de la victoria.

Estas obras hacen parte de las muy publicitadas 4G, con las que vanagloria, el “mejor”, como se autodenomina Germán Vargas Lleras, quien le había puesto su sello característico; aunque, parece que la única singularidad que lo define son los escándalos de corrupción: los cuestionados pactos con clanes familiares y mafias políticas regionales del país; además, del Cartel de la Toga, una Fiscalía hecha a su medida, a cargo del cuestionado Néstor Humberto Martínez Neira; como sus presuntos nexos con los paramilitares y como el mismo lo confirmó a un noticiero nacional, su campaña a la presidencia que inició siendo alto funcionario del actual gobierno, sin que hasta el momento la Procuraduría General de la Nación se haya pronunciado al respecto, en uno de los más ofensivos silencios de Fernando Carrillo Flórez.

Ahora bien, para nadie es un secreto que las famosas 4G, no son otra cosas que un entramado de corrupción, como se demostró con Odebretch que sólo buscaban reducir costos, aumentar la ganancia del sector financiero y dejarnos sus peajes usureros en la entrada de cada pueblo del país. Esa fue su tarea y de la plutocracia colombiana. Y ahora, otra vez la realidad quedará en manos del Cartel de la Toga de la Corte Suprema Justicia, lo que garantizará nuevamente la oscura impunidad.

Mientras tanto, los responsables de la obra, como lo es Coviandes, filial del Grupo Aval y Corficolombiana -de Luis Carlos Sarmiento Angulo, dueño de El Tiempo- nos demostrarán y dejaran por sentado quienes son los verdaderos dueños del país, porque de seguro las investigaciones nunca llegarán al fondo y los colombianos nos conformaremos con una casa por cárcel de 7 años como máximo para algún chivo expiatorio.

Es preciso señalar que la Concesionaria Vial de los Andes S.A.S –  Coviandes S.A.S., actualmente bajo la gerencia de Alberto Mariño, “es constituida mediante la escritura pública No. 6997 en Bogotá, con el objeto de participar en licitaciones de diferente índole para el desarrollo de proyectos de infraestructura por el sistema de concesión”. Es así como el 2 de agosto de 1994 se firmó el contrato de concesión No.444 de 1994 para la operación y mantenimiento de la vía Bogotá – Villavicencio; posteriormente, cedido por el INVÍAS a la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI. Finalmente, esta tragedia inició el 22 de enero de 2010, cuando se suscribió el Adicional No. 1 para la construcción de la doble calzada Bogotá – Villavicencio, sector  El Tablón – Chirajara, cuyo costo es alcanzó los 2.5 billones de pesos.

De seguro los colombianos no tendremos el derecho a preguntar por las razones técnicas que produjeron el desplome Puente y los ingenieros como los tecnócratas del Estado nos van a decir, como siempre lo hacen, que se debió a múltiples razones y argumentarán entre ellas las “complejidades geofísicas” de la orografía del sector. No obstante, la conclusión será una sola: Pueden caerse hasta el firmamento en nuestro país, menos Germán Vargas Llera, porque el tiene a Luis Carlos Sarmiento Angulo, la Fiscalía, el Cartel de la Toga y El Tiempo. Da vergüenza un país así.

Fotografía: Tomada de la Social Media.