DEL SÍMBOLO A LA DECORACIÓN

Establecer una relación entre lo simbólico, lo imaginario y lo real, revela las tensiones entre los procesos del sujeto, la construcción de sentido, los usos sociales que le da a sus búsquedas, la lógica de las distopías, y podría definirnos a nosotros mismo. El hecho lo abordaremos a partir de la tendencia con más seguidores hoy en el mundo es el llamado “salto cuántico a la quinta dimensión - 5D” o era de Acuario.

La nueva moda se soporta en evidencias científicas que el mundo apenas comienza a conocer, como ocurrió hace una semana cuando los geólogos le señalaron al mundo que en centro de la tierra (manto) se había detenido. 

El anterior fenómeno del que apenas comienzan a investigar sus consecuencias; sin embargo, hace varios años, ya nos habían hablado ampliamente de otro: el cambio de polaridad de la tierra y en el 2022 del aceleramiento del tiempo. De otra parte, también del descubrimiento del Campo akasa dentro de la teoría holográfica, término que el científico y filósofo de la ciencia Ervin Laszlo, extrapoló del sistema religioso hindú y se conoce como “registro akassico”, su constructo se expone con excesiva rigurosidad en su libro «The Self-Actualizing Cosmos: The Akasha Revolution in Science and Human Consciousness» y se conoce como “registro akassico”. 

Al mismo tiempo, los predicadores del Apocalipsis, que tienen canal propio, bajo el control de la cosmovisión judía como lo es History Chanel, seguirle allanando el camino al pánico como estrategia descrita en la teoría del Shock para afianzar el control social e inocular el miedo con el fin de los tiempos. 

La tesis central podría hallarse en el llamado “Diseño Inteligente”, y se constituye en la otra mirada de la evolución del universo y la aparición de la vida, a partir de la intervención de Dios; ellos nos presentan como evidencia los poderosos textos bíblicos. 

Por otro lado, como se acostumbra en estos tiempos, frecuentemente se nos está demostrando con evidencia fáctica que las profecías de Nostradamus, Baba Vanga o del argentino Benjamin Solari Parravichini, entre otros, son parte de una realidad que sobrepasa todo entendimiento y del cual se puede llegar bajo los efectos de los estados alterados de conciencia, a los que se llega por diversos caminos, con la exposición a la música, el color, los efectos de los alucinógenos, como el yagé en Colombia o la Ayahusca en Perú o el peyote en México. 

A la par los medio de información validad a dudosos personajes a los que se califica como videntes o médium espirituales y que hacen parte del Jet Set del espectáculo, un producto más de la contemporaneidad. 

En medio de este auge del “salto cuántico”, se supone que los seres humanos comenzaremos a vibrar a partir de la conexión con el cosmos, porque somos parte del todo, lo afirman desde los principios herméticos consignados en el Kybalion, hace mucho tiempo o las importantes aproximaciones que realizó Allan Kardec en el “Libro de los Espíritus”, padre del espiritismo moderno.

Así mismo, la “5D” nos propone desarrollar otro tipo de conciencia, a materializar nuestra propia realidad y un desarrollo profundo de la religiosidad que sobrepasa los límites formales del tempo o la iglesia y se convierte en una búsqueda personal, biunívoca y multidimensional, para usar el concepto de Herbet Marcuse. 

 Los populares mensajes que circulan en las social media, son hoy ampliamente usados como profecía de la autoconfirmación o dispositivo de programación neolingüística, que tuvo su furor en los años 90 del siglo pasado dentro de lo que se conoció como la “Nueva Era” y la irrupción de las medicinas bioenergéticas o terapias alternativas. 

Al mismo tiempo, podemos señalar que proliferan los gurús hindúes, tibetanos los pastores sanadores, los canalizadores, nuevos canales de televisión dedicados a los temas religiosos de la más amplia gama de teología y confesiones y, también, emerge todo un merchandising que creo una nueva franja de mercado y de consumidores ávidos de participar del “salto cuántico” y una nueva profesión con mucha perspectiva económica y en crecimiento como son el Coaching Personal. 

Sobre la Imagen 

Uno de los iconos de moda es el símbolo del infinito, muy usado para señalar cierto progreso de la condición humana, reafirmar la conciencia o materializar realidades y hace parte del Diseño Inteligente y se usa dentro de la estructuración de la llamada “arquitectura divina”. 

Al abordar una de las imágenes más utilizadas, asociado al universo y la divinidad, casi siempre aparece en color dorado, plateado u oro y sobre un fondo negro. ¿Y quién dijo que en universo no hay luz? Si es la luz el contenedor de su memoria, su información; además, el recorrido de la luz, nos permitió crear el concepto de tiempo como patrón de medida. 

Por otro lado, los tradicionales colores que utilizan en el icono expresan el ser de la individualidad sobre lo colectivo en nuestra sociedad: la obscenidad de la codicia, que ha establecido nuestras relaciones de explotación y de esclavitud del modelo económico neoliberal. Luego entonces, se convierten en la aceptación del status quo: el Gran Reset del que se vienen hablando desde el Foro Económico de Davos hasta en las Naciones Unidas pasando por el Papa Francisco, entre otros, como la única salida que tiene el capitalismo de sobrevivir, aparte de la industria de la guerra; así se niega la realidad. 

Por otro lado, la imagen que propones para su análisis por lo popular que resulta en las social media, trae un texto: “Lo que llevas en las manos es temporal… Lo que llevas en el alma es infinito”. Según Jean Chateau en su texto “Las Fuentes de lo Imaginario”, habla de las manos como extensión del cuerpo y la primera herramienta de los primeros hombres, porque con ellas, literalmente construimos nuestra civilización. 

Desde esta perspectiva, ¿qué será lo efímero: la energía del dinero, la posibilidad de edificar la realidad como un proceso colectivo y de aprehensión del mundo? Acaso, mientras lo que llevas en las manos es lo público, lo que llevas en el alma se esconde es lo privado, lo desconocido por los demás, lo individual. 

Aunque, por más decretos presuntamente amorosamente intencionados que lances a Dios o el Universo, según la teología y la física cuántica no se le puede mentir como lo hacemos diariamente con los hombres; recuerda que la Divinidad o la energía cósmica, saben lo que habita en el corazón de la gente, pero que escondes para los demás. 

Y eso que llevas en el alma, así te esfuerces tampoco se puede esconder, porque el subconsciente siempre aflora de manera inesperada en los actos fallidos y terminan por reflejarse en tu mirada, la verdad, el aura y no en los que huye o sale corriendo por cobardía, eso devela finalmente lo que llevas realmente por dentro y es ahí donde aparece la conciencia, es inevitable, por más fachadas que pongas en la puerta de tu casa, la sonrisa con la que posas en tus fotografías y lo que postees en los muros de las redes sociales o microblog. 

Por su parte sabiamente lo expresa la sabiduría popular: «Aunque te vistas de seda, mira como te quedas». Y son esos deseos que llevas en el alma y con los que materializas la realidad, podría regresar a nosotros y constituirse en su Karma. Que se describe de otra manera en la Biblia cuando nos indica que se te devolverá 70 veces 7: -Así que te deseo lo mismo que tú, o tu mamá y tu entorno afectivo me desea… Hecho Esta. 

En el ámbito territorial, en el municipio de Algarrobo, Magdalena, uno de los oficios con mayor demanda es el de la manipulación energética (prácticas del sincretismo cultural como la santería, además de la tradicional brujería), es una sociedad proclive a la resolución de sus conflictos y donde algunos establecen sus proyectos de vida con estas praxis que hacen parte de sus imaginarios colectivos, que van adheridas a la piel algarrobera. Mientras, otros señalan que una colectividad con estos usos y costumbres está condenada a la maldición de su propio atraso; al mismo tiempo; la desesperanza habita en las expresiones de desamor de esa doble moral y ética evolucionista y del leseferismo estoico donde “todo se vale y todo se puede” y, donde solo se sobrevive con mentiras; hoy en la única finca con alcaldía propia, persiste esa actitud sadomasoquista de hacerse pasar siempre por víctima, porque la culpa siempre será de los otros. 

Y como estamos en un mundo de imitadores que solo siguen la tendencia que le propone las redes sociales o los medios de información, los colombianos no se sustraen de ello y simplemente hacen el copy-page (copiar y pegar). Pero aún no saben para qué funcionan ni como funcionan los símbolos o que significa la conciencia colectiva, concepto acuñado por el sociólogo Émile Durkheim para explicar cómo los individuos (únicos) se unen en unidades globales, como grupos sociales y sociedades, etc. 

Por eso, el uso de los símbolos, se convirtió no para expresar conciencia sino como una simple fachada decorativa de la vida. Recuerda, que el primer paso para darle poder a un símbolo es hacerlo uno mismo, es como el bricolaje de nuestra conciencia.